Alimentación y Artritis Reumatoide

“El esqueleto nos da la historia de un individuo. Sexo. Edad. Antepasados. En algunos casos, la historia clínica o cómo murió. Los huesos antiguos sin una fuente de información de las poblaciones extinguidas. Cómo vivían, cómo morían, qué comían, las enfermedades que padecían”.
Kathy Reichs

La artritis reumatoide, es una inflamación de causa desconocida, se caracteriza por provocar la inflamación de la membrana sinovial, de las articulaciones y en los tejidos circundantes. Se da con mayor frecuencia en la etapa media de la vida y en mujeres. Afecta principalmente a las pequeñas articulaciones de las manos y de los pies, y produce :

• Inflamación

• Dolor

• Incapacidad funcional y

• Deformación articular

Es frecuente en los enfermos de artritis reumatoide, que se produzca anemia, úlcera de estómago, falta de proteínas y cierto grado de desnutrición. Por ello, y porque ciertos alimentos empeoran la enfermedad, es importante seguir una alimentación adecuada.

Se ha comprobado que los enfermos de artritis reumatoide presentan un índice elevado de anticuerpos frente a dos tipos de bacterias intestinales: Escherichia coli y Proteus mirabilis. Los pacientes con artitis reumatoide presentan también desequilibrios microbianos (disbiosis) muy similares a los que se observan en pacientes que padecen enfermedades inflamatorias intestinales.

Ambas especies bacterianas comentadas antetiormente proliferan cuando se sigue una dieta omnívora, mientras que su número decrece con una alimentación vegetariana o con el consumo de yogures bífidus y probióticos. Esta puede ser una de las explicaciones al hecho de que la artritis reumatoide mejora al seguir una dieta vegetariana, recomendada siempre bajo supervisión de un especialista en nutrición.

Nos centraremos en los alimentos recomendables y que debemos potenciar en nuestra alimentación diaria y  aquellos  que debemos reducir e incluso eliminar para mejorar la artritis reumatoide, así como, los motivos y efectos que producen estos alimentos sobre dicha enfermedad.

ALIMENTOS QUE DEBEMOS POTENCIAR

FRUTA: Una alimentación a base de fruta y hortalizas crudas proporciona una mejora sustanciosa en la evolución de la artritis reumatoide, reduciendo la inflamación, el dolor y la deformidad articulares.

LEGUMBRES: Satisfacen la mayor demanda de proteínas en estos enfermos. Combinadas con los cereales, proporcionan proteínas de buena calidad. Está demostrado que la alimentación vegetariana estricta (vegana), en la que las legumbres constituyen uno de los alientos fundamentales, reduce la inflamación y mejora la evolución de la artritis.

SOJA: Resulta especialmente aconsejable debido a que es uno de los pocos vegetales que proporciona ácidos grasos omega-3 similares a los del pescado, de acción antiinflamatoria. El “Tofu“, la leche de soja y otros derivados resultan igualmente convenientes.

HORTALIZAS: Junto con las frutas y demás alimentos vegetales, debe constituir la base de la dieta antiartrítica. La única limitación son las hortalizas de la familia de las Solanáceas, ya que pueden producir reacciones alérgicas en algunos pacientes con artritis, debido a su contenido en solanina. Por lo tanto, conviene evitar o usar con prudencia los tomates, pimientos, patatas y berenjenas.

JENGIBRE: La raíz de este vegetal es sumamente aromática, con sabor picante y exótico que lo hace incomparable. Destaca por sus propiedades analgésicas y antiinflamatorias. Según trabajos de investigación puede inhibir a las proteínas implicadas en los procesos inflamatorios en la artritis. Posee casi de 40 componentes con propiedades antiinflamatorias ( gingeroles, cineol, limoneno, alfa-pineno, beta-pineno..) y otros componentes con propiedades puramente antiartríticas como son la vitamina C, betacarotenos, selenio, zinc, calcio, cobre, magnesio, ácido linoleico entre otros.

FRUTOS SECOS: Proporcionan, ácidos grasos poliinsaturados que reducen la inflamación en los pacientes de artritis, de forma similar a como lo hacen los aceites de pescado y son buena fuente de vitamina E, recomendable en esta enfermedad, de proteínas y de minerales.

CEREALES INTEGRALES: Constituyen la base de la alimentación vegetariana que como ya hemos apuntado se recomienda seguir en caso de artritis reumatoide.

ACEITES: los aceites vegetales ricos en ácidos grasos poliinsaturados frenan la evolución del proceso inflamatorio causante de la artritis. Los aceites de oliva, soja, pepita de uva y germen de trigo son algunos de los más recomendables.

ACEITE de PESCADO : Está comprobado que tomando en forma de suplementos (hasta 10 gr diarios) ejerce una ligera acción antiinflamatoria que reduce la necesidad de tomar fármacos. Sus efectos comienzan a notarse a partir de los dos meses, y se atribuye a los ácidos grasos omega-3.

CHUCRUT: Sus efectos favorables sobre la artritis se atribuyen al ácido láctico que contiene.

GROSELLA NEGRA: Las hojas, y en menor medida los frutos del grosello, frenan los procesos inflamatorios de las articulaciones y ejercen actividad antirreumática.

NUEZ: Es una de las fuentes vegetales de ácido linolénico, perteneciente a la serie omega-3 y similar a los del pescado, la nuez ejerce actividad antiinflamatoria en caso de artritis.

GERMEN DE TRIGO: También proporciona ácido linolénico omega-3 de acción antiinflamatoria, además de vitamina E, que contribuyen a frenar la enfermedad.

YOGUR: Los yogures “Bifidus” que contienen lactobacilos vivos dan buen resultado en la artritis reumatoide, asociados a una dieta cruda a base de vegetales. Una de las explicaciones de su consumo es que, tanto el yogur como los vegetales, favorecen un cambio en la flora intestinal, con reducción en la cantidad de ciertas bacterias, antes comentadas, que podrían intervenir en la génesis de la artritis reumatoide.

ALIMENTOS A REDUCIR O ELIMINAR

CARNE: En diversas experiencias se ha comprobado que una dieta omníovora agrava la enfermedad. Una de las explicaciones a este hecho es que la carne contiene una elevada proporción de ácido araquidónico, un ácido graso a partir del cual el organismo produce los llamados eicosanoides. Estas sustancias desencadenan las reacciones inflamatorias.

CERDO, CARNE: Se ha comprobado que es una de las que más favorecen la inflamación, posiblemente debido a su elevada proporción de ácido araquidónico. Los enfermos de artritis reumatoide deben abstenerse completamente de ella.

BEBIDAS ALCOHÓLICAS: El consumo de cualquier tipo de éstas bebidas, agrava la evolución de la artritis reumatoide y de otros reumatismos.

LECHE: La actividad de los anticuerpos IgG e IgA contra la alfa-lactoalbúmina (una proteína de la leche) es más elevada en los pacientes con artritis reumática. Esto hace pensar que la leche pueda ser uno de los alimentos responsables de la reacción inflamatoria propia de la artritis. A falta de nuevas investigaciones que lo aclaren, parece prudente que los artíticos se abstengan de consumir leche de vaca.

HUEVO: Después de la carne es el alimento más rico en ácido araquidónico, precursor de los eicosanoides responsables de proceso inflamatorio, como ya hemos comentado.

ADITIVOS: Pueden ser causa de alergia alimentaria, lo que agrava la reacción inflamatoria. Es prudente evitar los productos elaborados que puedan contener aditivos causantes de alergias, tales como los colorantes alimentarios.

Espero que esta guía de alimentos os sean de ayuda si padecéis artritis reumatoide, eso si, se recomienda siempre consultar a un especialista en Nutrición que, evalúe, elabore e instaure una dieta adecuada  y equilibrada para cada paciente en particular.

Fuente|Enciclopedia de los Alimentos 2ª parte / Poderosos Superfoods edt. LIBSA